Santa Pola: Levante, caliza y Tabarca a un par o tres millas ¿no?

Jero nos cita en la punta más Este de Santa Pola para enseñarnos algo de lo que más ama. Aparcamos junto al mar y empezamos a trotar con la sensación de que no nos bañaremos para acabar la sesión. Sopla un levantillo y las olas azotan suaves y nerviosas la costa.
Con el viento de culo empezamos paralelos al mar. Directamente por una bonita senda hasta que Jero nos ordena un ascenso violento hasta el faro de Santa Pola. Aquí el viento se acusa bastante más. Este es, quizás, uno de los faros alicantinos con mejores vistas que conozco:
Con las últimas luces del día y las primeras de Tabarca nos coronamos de frontales y seguimos por el bosquete de pinos hasta los restos de las baterías antiaéreas. Viajar con Jero es aprender del terreno, conocer y saciar curiosidades. Además, ama su pueblo más que la trucha al trucho y se conoce cada rincón de la sierra más mister Proper mi cocina.
Con esas llegamos al vértice geodésico que ha ganado unos metros de altura desde que lo han ubicado arriba del bunker.
Lo trepamos, porque no vamos a ser menos, y vemos lo que la noche nos deja en cada barrido de la luz del faro.
Seguimos entre pinos y vamos tocando urbanizaciones y regresando al bosque siempre al trote. Los escasos desniveles del recorrido nos permiten mantener una carrera más o menos constante todo el tiempo.
Jero va indicando un barranco, una cueva, la dolina, el algibe, la casa en ruinas, El Salt, por esta pista se llega a... Pese a no ver un pijo, salvo lo que nos deja la frontal, me siento ubicado en todo momento.
Llegamos a la Torre vigía y la fiesta toca a su fin. Descendemos prácticamente de sopetón todo el desnivel que logramos en la subida al faro, un tramo urbano que coincide con la media de Santa Pola y acabamos. El resto ya lo conoceis: Bocatas, cervezas y palique. En esta ocasión sobre un lecho de césped artificial de tacto insulso y junto a una enorme cadena de barco a la que le falta un ancla de cuatro toneladas de esas que ponen de adorno en los pueblos marineros. Y falta porque en tiempos de crisis ni eso se respeta.
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Mapa, perfil, wikiloc y ruta cercana:

** Secretillos de la Sierra de Santa Pola.
** De cabo a cabo (Santa Pola-Alicante).

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